lunes, 16 de noviembre de 2015

SISTEMA DEL MEJOR POSTOR (o más barato o más veloz)

Desde hace algún tiempo, me he fijado que cada vez son más las agencias de traducción que usan sistemas de «puja» o de «tonto el último» para asignar sus traducciones.

Con el sistema de puja, me refiero a lo siguiente:

La agencia registra un proyecto en su sistema y se envía un correo electrónico a los traductores mediante el que se abre un proceso de puja. El traductor debe ofrecer un precio para el proyecto y el mejor postor, que me atrevo a decir que es el más barato en un 80% de los casos, se lleva el proyecto. A menudo, para colmo, este proceso no acaba aquí, sino que los traductores que han pujado comienzan a recibir correos sobre ofertas mejores de otros colegas con el fin de que bajen su «puja» hasta que me imagino que el proyecto se asigna al que más «se ha bajado los pantalones». Creo que sobra decir lo que opino de este sistema, pero, por si no se infiere, lo que opino es que está claro que las agencias que usan este sistema para asignar sus proyectos no tienen ningún interés en la calidad de las traducciones que ofrecen a sus clientes y basan su criterio únicamente en el precio. Así que os aconsejo, queridos colegas, que huyáis de este tipo de agencias porque tan solo os harán perder vuestro preciado tiempo y formaréis parte de un sistema en el que los traductores tratan de pisarse unos a otros para al final trabajar por cuatro duros.

El sistema de «tonto el último» quiero pensar que es un poco más racional que el anterior sistema y que los proyectos se ofrecen solo a traductores que tienen perfiles parecidos. Este sistema se basa en que la agencia envía una solicitud de traducción masiva a todos los traductores que coinciden con unos criterios de búsqueda, que espero que sean algo más que combinación lingüística y un precio, y el traductor que primero acepta la solicitud se lleva el proyecto. Mi experiencia con este tipo de sistemas es también negativa porque me muestra que hay muchos traductores que aceptan los proyectos a ciegas, ya que, con frecuencia, el proyecto se asigna dos minutos más tarde de recibir el correo electrónico y, amigos míos, no creo que ningún traductor, salvo que tenga superpoderes, sea capaz de valorar el trabajo en dos minutos. Esto me hace plantearme que muy probablemente haya muchos proyectos que se asignen a personas que realmente no están preparadas para asumirlos y esto sin lugar a dudas tiene que afectar a la calidad.

Por supuesto, cada agencia es libre de usar el método que quiera y probablemente se adopten estos métodos porque tienen mucho trabajo y están desbordados, pero el factor humano y la figura del gestor de proyectos es vital para que un trabajo se realice correctamente. Asimismo, vosotros, mis colegas traductores, también sois libres de trabajar para quien queráis, pero, desde mi humilde opinión, ir a la caza del proyecto no os va a convertir en mejores traductores, probablemente os haga trabajar por tarifas irrisorias y os termine frustrando por aceptar trabajos que no se adaptan a vuestros conocimientos.


Y bueno, esto es todo lo que tengo que decir de estos dos sistemitas que están tan de moda.

viernes, 23 de octubre de 2015

De bodas internacionales (Final) - Instrucciones de boda civil en España

Hoy pretendo cerrar ya este capítulo y quiero hacerlo hablando de mi boda.

En realidad, mi boda aunque fuera medio neerlandesa medio española se celebró en Aranda y siguió las costumbres españolas aunque muy a nuestro estilo. Fue una boda civil que organizamos siguiendo nuestro propio criterio y a la que tratamos de dar un estilo muy personal. Tengo que decir que nos lo pasamos pipa y creo que la mayoría de invitados (espero que todos) se lo pasaron igual de bien que nosotros.

No obstante, no es esto lo que os vengo a contar, lo que quiero es hacer un resumen de aspectos que hay que tener en cuenta si queréis realizar una boda civil en España con alguien de fuera de España.

1) Tramitad la documentación lo antes posible. Se tramita en el Registro Civil de la ciudad en la que estáis empadronados al menos uno de los dos, no en la ciudad donde queréis casaros salvo que estéis empadronados uno de los dos en ella.

- Documento nacional de identidad o pasaporte de los cónyuges y documento nacional de identidad del testigo o de los testigos.

- Empadronamiento o certificado de residencia de los dos últimos años: los dos debéis documentar vuestra residencia de los dos últimos años. Si habéis vivido fuera de España, necesitaréis un certificado de empadronamiento de la vivienda en la que habéis vivido apostillado y con una traducción jurada. La apostilla la tenéis que tramitar en el país donde habéis vivido. No se tramita aquí. Es decir, podéis tramitarla por correo, pero las autoridades españolas, los consulados y las embajadas sitas en España no se encargan de poneros la apostilla de un documento emitido fuera de España.

Por ello, haced esto con tiempo, pero tened en cuenta que el documento de la última residencia (la actual) tiene que tener una validez de tres meses respecto a la fecha de inicio del expediente.

Como en las ciudades grandes se tarda en abrir los expedientes, en nuestro caso en Madrid, tardaron 4 meses y en sitios como Madrid para darte la cita para abrir el expediente te piden ya presentar parte de la documentación, puede que te toque pedir un certificado de empadronamiento para pedir la cita y tenerlo que pedir de nuevo para el día de la cita. Recordad que esto ocurre solo con el certificado de empadronamiento de tu domicilio actual. Los anteriores no es necesario que cumplan el periodo de los tres meses, pero consultadlo con el Registro Civil de la ciudad en la que os encontráis.

- Certificado literal de nacimiento: los españoles lo podéis pedir por Internet y en un par de semanas lo tendréis en casa. Es gratuito. Los extranjeros deben tramitarlo a través de su país (en algunos casos puede que la embajada se lo tramite, mi marido tuvo que escribir al Registro Civil de su ciudad en los Países Bajos), pero deben solicitar (si son europeos) un certificado de nacimiento plurilingüe para que se lo emitan ya en castellano. Si no, tendrán que presentarlo apostillado y con una traducción jurada del mismo. Tiene que tener seis meses de validez con respecto al inicio del expediente.

Los españoles solo necesitan estos tres documentos. Los futuros cónyuges extranjeros también necesitan:

- Declaración del estado civil o de capacidad matrimonial: la pueden tramitar por medio de la embajada. Normalmente se la pueden proporcionar directamente en castellano. Si no, habrá que apostillar el documento y hacer una traducción jurada.

- Si estáis divorciados, consultad que otros documentos debéis presentar.

Llamad al Registro Civil o en el caso de Madrid, id directamente. Os aconsejo que vayáis con unos 9 meses de antelación para pedir la cita con el fin de que os la den unos 4-3 meses antes de la boda, ya que desde que se abre el expediente hasta que se autoriza pueden pasar 3 meses y es mejor no jugar con fuego y que luego no podáis casaros cuando queréis.

2) El día de la cita tenéis que ir con vuestra documentación con la validez mencionada y con uno o dos testigos (depende de dónde se tramite el expediente).

3) Cuando el expediente esté abierto, tenéis que decidir si os vais a casar en el propio Registro Civil y pedir la correspondiente cita (en Madrid, hay mucha cola, unos seis meses) o si vais a casaros en el Registro Civil (Juzgado) de otra ciudad o en un ayuntamiento. Si os casáis en ese mismo Registro, solo tenéis que pedir la cita y volver ese día con los testigos. Si os vais a casar en otro Registro Civil, dependiendo del sitio, el propio Registro Civil donde habéis tramitado el expediente les mandará el expediente o tendréis que llevárselo vosotros mismos en mano y concertar con ellos la cita de vuestra boda. Si os casáis en un ayuntamiento, si este se encuentra en la misma ciudad que el Registro Civil, el Registro Civil puede mandárselo o puede que os toque llevarlo vosotros mismos y si está en otra ciudad, primero tendréis que llevar el expediente al Registro Civil de esa ciudad y una vez que se haya trasladado el expediente y el Registro de esa ciudad lo haya aprobado, habrá que llevarlo al ayuntamiento. Puede que se encargue el propio Registro o que lo tengáis que hacer vosotros mismos. Preguntad estas cosas.

4) A continuación, el ayuntamiento tendrá que preparar las actas que firmaréis el día que os caséis. Recordad que hay ayuntamientos que permiten que el concejal de turno saque las actas para que las firméis el día de vuestra boda, pero que también hay ayuntamientos que prohíben sacar las actas del edificio y eso implica que os tengáis que casar un par de días antes o después de vuestra boda. El ayuntamiento suele necesitar una o dos semanas para tramitar vuestras actas. Yo tuve suerte y me lo hicieron en una semana y me permitieron sacar las actas, pero no contéis con ello.

5) Tras casaros, os darán varias copias de las actas de matrimonio. Una de las copias será para el ayuntamiento, otra para vosotros y otra la tendréis que volver a llevar al Registro Civil del lugar donde os habéis casado para que os emitan el libro de familia. Las actas de matrimonio van firmadas por los cónyuges, los testigos (en los ayuntamientos suelen pedir un mínimo de dos testigos a diferencia del Registro Civil) y por el concejal.

Creo que esto es todo. Por supuesto, si la boda es en la iglesia, ellos se encargan de los trámites aunque a cambio de un pequeño donativo para la iglesia.

Espero que esto os sirva, a nosotros nos hubiese venido muy bien contar con toda la información porque tuvimos un par de problemillas con el tema de los plazos y la documentación, aunque al final el 4 de julio tuvo lugar la boda tal y como habíamos planeado.





lunes, 28 de septiembre de 2015

Hasta siempre, Áurea

Esta entrada no está dedicada a un tema concreto sino a una persona.

No sé si os habéis fijado, pero el logotipo de TransCreat es un triángulo equilátero. Este triángulo equilátero representa tres partes exactamente iguales que vienen a transmitir la idea de que somos un equipo de tres iguales, pero a partir de octubre decimos adiós a una parte del triángulo, es decir, a una de las tres fundadoras de este proyecto que decidimos llamar TransCreat.

Nuestra buena amiga y compañera Áurea ha decidido emprender una aventura para cumplir el sueño de su vida y nosotras le deseamos lo mejor, aunque con pena y sabiendo que una parte de lo que hemos creado se va con ella. Áurea es una gran traductora, una buena compañera y una fantástica persona y nos va a costar mucho encontrar a alguien como ella, pero nosotras estamos dispuestas a seguir dando guerra.


TransCreat seguirá hacia delante aunque ahora el triángulo se apoye en tan solo dos pilares. ¡Hasta pronto!


jueves, 25 de junio de 2015

De bodas internacionales (parte III)

Después de unos meses sin parar, me lanzo a escribir la tercera parte de esta entrada, ya que os tengo un poco descuidados.

La boda que prometí que iba a describir era la de un chico español y una chica italiana en Italia. Puesto que la boda tenía a uno de los cónyuges de España, no me pareció muy diferente a nuestras bodas, pero sí que hay unos cuantos detalles dignos de mención.
Por ejemplo, el cóctel no se abrió hasta que no llegaron los novios y probaron el primer bocado. El cóctel, además, era tipo bufé y me recordaba mucho al típico aperitivo del norte de Italia. En España, a menudo los novios aprovechan el cóctel para hacerse las fotos. En este caso, se las hicieron y luego dieron comienzo al cóctel.

Lo que me llamó la atención de verdad fue la cantidad de comida que nos sirvieron. No faltó ni el risotto ni la pasta y nos sirvieron un montón de platos. Es decir, la comida no se componía de entrantes, pescado y carne, sino de muchos platos diversos como entrantes o primeros y una buena carne.

Me sorprendió que durante la comida hubo una actuación fuera del comedor del grupo del hermano de la novia y los invitados españoles casi ni nos enteramos porque no nos esperábamos que durante el banquete hubiese entretenimiento también al aire libre.

Respecto a los regalos, tampoco vi ninguna diferencia entre lo que nosotros damos y ellos suelen dar.

Lo que sí que he hecho ahora es investigar un poco sobre las costumbres de las bodas italianas puras más tradicionales:

  •     El novio pide permiso al padre de la novia para casarse con su hija.
  •   El novio a continuación le regala el anillo de compromiso a la novia.
  •  Antes de la celebración de la boda, habitualmente en la despedida de soltera, se organiza el ajuar de bodas: recuerdos y ropa que los novios usarán cuando ya se hayan casado.
  •  Se suelen evitar las bodas en Cuaresma y el mes de mayo por ser el mes dedicado a la virgen (las religiosas, claro) e incluso agosto porque dicen que trae mal fario…
  •  A menudo los novios caminan juntos al altar como símbolo de su camino de unión.
  •  El novio debe guardar un pedazo de hierro en su bolsillo para repeler a los espíritus malignos y la novia debe evitar usar joyas de oro hasta que se hayan intercambiado los anillos de boda.
  • Hay que romper un vaso cuando la ceremonia haya culminado y contar los pedazos de vidrio rotos para saber cuántos años la pareja vivirá felizmente casada.



Con esta boda cierro ya casi este tema, aunque aún queda otra boda: ¡la mía la semana que viene! ¡Entre española y neerlandés, pero a lo arandino! Como he tenido mil aventuras al organizarla, os haré un resumen del procedimiento a seguir para casarse en España con una persona extranjera aunque europea.


jueves, 14 de mayo de 2015

El nativo para todo

La semana pasada, por segundo año consecutivo, impartí el tema de localización de videojuegos en línea en el Máster de Traducción Audiovisual de la Universidad Autónoma de Barcelona.
Aunque aún me quedan unos cuantos ejercicios de corregir, ha sido una gran experiencia y espero que también lo haya sido para mis alumnos.

La localización de videojuegos es un tema cada vez más recurrente en las aulas. Sin embargo, los videojuegos en línea siguen siendo bastante desconocidos, a pesar de que hay mucho trabajo en esta área.

Uno de los puntos que mencioné en la unidad y que les llamó la atención a mis alumnos es el hecho de que haya muchas empresas de videojuegos en línea que usen a sus “Community manager o soporte del juego” como traductores.



Puede que resulte sorprendente, pero muchas empresas pequeñas de videojuegos en línea siguen contratando a un “nativo para todo”, al que primero le ponen como apoyo para su comunidad de jugadores y, después, le piden que traduzca anuncios para el foro e incluso videojuegos enteros. Por supuesto, esto ocurre principalmente en empresas muy pequeñas y, a medida que crecen, van cambiando el modelo. En mi opinión, esto es un error grave por varios motivos:

El primero es que no estás contratando un profesional y, por tanto, no puedes esperar que la calidad de las traducciones sea la esperada.

En segundo lugar, la comunidad de jugadores se acostumbra a esas traducciones no realizadas por alguien profesional y cuando pretendes traducir el juego por un traductor, este se encuentra con muchos obstáculos por el camino. En los videojuegos en línea, la comunidad de jugadores es muy importante y puesto que los juegos se nutren de mantener contenta a esta comunidad, resulta esencial que las traducciones sean aceptadas por los miembros de esta. Os pongo un ejemplo: cuando yo llegué a Bigpoint, en el juego Seafight la taberna de los piratas se llamaba “pub” porque así lo había traducido el soporte del juego que era quien traducía los juegos al principio. Yo quise cambiar el nombre por “Taberna” y me topé con un no por parte de la comunidad porque ya estaban acostumbrados a que los piratas visitaran el “Pub”.

En tercer lugar, una persona no puede hacerlo todo y al final se tiene que sacrificar un trabajo por el otro: o ayudas a los jugadores o te esmeras en la traducción.

A menudo, estas personas no están formadas en Traducción así que traducen a otro ritmo y basan sus decisiones en su experiencia (ojo, no digo que esto sea malo), pero puede que no dominen aspectos gramaticales, técnicos o estilísticos que un traductor profesional sí dominaría.


El problema está en que la empresa parte de la base de que todo aquel que es nativo en un idioma tiene la capacidad de traducir y, al no tomarse en serio el tema de la traducción, al final su producto no recibe la aceptación que merece entre el público destinatario. Al final, el tratar de ahorrarse un puesto de trabajo termina saliéndoles más caro. Por suerte, poco a poco, veo que las agencias reciben cada vez más encargos de empresas de videojuegos en línea, es decir, este producto se traduce cada vez más y, además, de manos de profesionales.

martes, 24 de marzo de 2015

Desarrolladores políglotas

Últimamente, hemos traducido una serie de videojuegos cuyas reglas de localización venían determinadas por el cliente.

Me explico: el cliente exigía que se tradujeran (o se dejaran sin traducir) ciertas cosas, por ejemplo: en un juego de cartas, no se traducía el nombre de las cartas y, en un MMORPG, había que escribir con mayúscula inicial todos los conceptos del juego (la palabra «Monedas», la palabra «Humanos», la palabra «Oro», etc.).

La razón por la que el cliente exige que se sigan estas reglas es muy sencilla: pretende simplificar la programación y el desarrollo del juego. Es decir, pretende publicar el juego en un servidor único para todos los videojugadores de cualquier rincón del mundo, de tal forma que puedan jugar entre ellos y, por tanto, todos llamen a las cartas de la misma forma o pretende usar un mismo ID o string para diversas posiciones del juego.

El problema principal es que estas decisiones vienen determinadas por el idioma de origen y hacen caso omiso de las reglas o deseos del público destino. En el juego de cartas, los nombres de las cartas tenían significado en el idioma origen y ese significado determinaba la función de la carta. Al no traducirse, ese significado se ha perdido por completo en el idioma destino. En el MMORPG por su parte, el idioma origen era el alemán, como sabemos en alemán los sustantivos siempre se escriben con mayúscula inicial. Por tanto, en el texto origen, los conceptos del juego del tipo «Monedas», «Humanos» u «Oro» aparezcan donde aparezcan siempre se escribirán en mayúscula, pero en la mayoría de idiomas, salvo que aparezcan como título, aislados o como primera palabra de una frase, estas palabras deberían escribirse con minúscula. El desarrollador se ahorra programar más de un ID para la misma palabra pero, a cambio, sacrifica la calidad del texto destino y hace que los lectores del texto destino crean que se están cometiendo errores de traducción.

En mi opinión, el problema reside en que las empresas desarrolladoras deciden localizar sus juegos sin realmente interesarse en el público al que se van a dirigir. Pretenden lanzar un producto rápidamente en otro idioma, pero no se plantean que en el otro idioma hay otras reglas distintas que cumplir. El resultado es que el producto esté traducido, pero no localizado, lo que, sin duda, afecta al éxito o fracaso del juego en el país de destino. Si pretendes triunfar en otro país o cultura, el primer paso es reflexionar sobre ese país y cultura, y adaptar tu producto a ello. Los localizadores suelen advertir de estas cosas a los desarrolladores y estos deberían darse cuenta de que el localizador trabaja como parte de su equipo y es uno de los primeros interesados en que su traducción sea aceptada. El problema es que la traducción se ve como un mero trámite y no como un instrumento para que el producto triunfe.

lunes, 26 de enero de 2015

¿Los gestores de proyectos deberían ser traductores?


Hace ya algún tiempo hablé de los gestores de proyectos y de la relación que deberían tener con los traductores desde mi punto de vista. Hoy quiero dedicar de nuevo una entrada a los gestores de proyectos, pero esta vez como reflexión o respuesta a la pregunta que formulo en el enunciado.

Como sabéis, yo he trabajado en los dos bandos y mis compañeras también. Empecé como traductora, pasé a ser jefe de equipo y a llevar la gestión de los proyectos de traducción, luego estuve en una agencia como coordinadora del equipo de gestión de proyectos y ahora vuelvo a traducir. Mis dos compañeras comenzaron, principalmente, como gestoras y ahora sobre todo traducen, aunque no hemos dejado de coordinar proyectos. Os cuento esto para que entendáis que intento opinar sobre este tema desde el conocimiento y no solo desde la posición de traductora autónoma que nunca se ha encontrado en la tesitura de tener que gestionar algún proyecto.

En mi opinión, los gestores de proyectos de traducción deberían tener formación de traductores. Es más, me tiro a la piscina y os digo que no vale con formación en filología o lingüística, la formación que necesitan es la del traductor con sus asignaturas de documentación y sus exámenes de traducción. Asimismo, deberían tener experiencia en traducción, ya que no sirve de nada que tengan los conocimientos teóricos si nunca se han encontrado delante de un texto real y han tenido que enfrentarse a él con una fecha de entrega imposible y la poca información contextual que a menudo proporcionan los clientes.

Considero que solo cuando te has visto en una situación similar, eres capaz de decidir quién es la persona más adecuada para realizar un encargo de traducción, qué plazo debes dar a esa persona y qué contexto tienes que proporcionarle. El hecho de saber lo que necesita un traductor, la documentación que va a precisar y saber adelantarte a las preguntas que puede formular son aspectos que pueden marcar la diferencia en tu trabajo como gestor de proyectos. No basta con recibir un encargo del cliente y reenviarlo al primer traductor que tengas en tu lista o al más económico, tu deber como gestor de proyectos consiste en gestionar de forma eficiente y eficaz el proyecto (a veces lo barato, se paga caro). Si te pones en la piel del traductor, puedes adelantar muchas cuestiones y quebraderos de cabeza, además de plantear desde el principio al cliente lo que vas a necesitar para ese proyecto.

Un gestor de proyectos necesita ser rápido y tener una visión global de todos los aspectos del proyecto, debe dominarlo y conocerlo, y hacer que el cliente se sienta seguro por haberle confiado el trabajo. ¿Quién mejor que un traductor para saber qué necesita otro traductor y qué necesita del cliente? 

Imagen extraída de: http://marketingparatraductores.com/

Sé que ya hay algunas facultades en las que se imparte la asignatura de gestión de proyectos y me alegro, ya que es una de las puertas que se abren a los traductores cuando terminan la carrera y creo que es necesario formarte un poco en ello, ya que no todo el que sabe traducir vale para gestionar al igual que no todo el que sabe gestionar, es capaz de traducir. Animo a todos los estudiantes a que cursen alguna asignatura de gestión para entender este trabajo y que tengan esa opción al salir de la carrera además de para que entiendan la presión y el estrés al que se ven sometidos muchos gestores de proyectos. Asimismo, animo a las agencias a que opten por traductores para esta labor.

Eso es todo por hoy ;)